11 abril 2021
-No tenía ganas de caerme, otra vez, en medio del pasillo de casa y decidí andar cogiéndome de las paredes sin acordarme de que había estado trapicheando en la cocina con la salsa de tomate de la pasta integral y … no lloré, solo pensé como arreglarlo aún y sabiendo que no tenía solución. Otro día cuento las consecuencias.
-Un amigo murciano de los de toda la vida, me manda un meme que me hace sonreír:
-Otro de mis mejores amigos, sin saberlo, pues me envía unos trescientos memes cada día a través del wasap, me manda un meme que consigue lo que yo mismo quería y debía hacer, desde que comencé a escribir esta bloguería de hoy:
-Y dejé de escribir.
Esas pequeñas cosas 
Muy oportunas las fotos de esos memes que al menos nos dan un minuto para la sonrisa, que falta hace. Un abrazo.
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Mi neuróloga me pide que no deje de escribir, que active el seso y despierte día a día y sin desfallecer. Que no sabes que contar, déjate llevar, escribe, piensa, vuela….y yo lo intento, aunque es cierto que hay días que cuesta y mucho, escribir dos líneas.
Un abrazo querida amiga Paz.
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Me consta que es así. Yo no tengo neuróloga pero me lo receto yo, aunque la inspiración está en horas bajas sobre todo para decir y cómo aquello que siento.
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Lo sé, se siente.
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