16 marzo 2017
En esta olvidada página bloguera de mis amores, encontré tantas y tantas satisfacciones que … pedí que todo fuera recordado como aquello que siempre quise vivir … como una nube … y ahí dejo mi pequeño homenaje a la página y a mi sentir y a ese grande entre los grandes de la música de mis sentidos, que son, inexplicada y esperadamente, cada vez más etéreos:
La gloria como una nube
Desaparece si miras otra vez
La fama va envileciendo
Ese pedazo intacto que queda de ti
Y ni siquiera el poder será
Capaz de neutralizar
Lo que se puede encontrar
Bajo una risa feliz
Y un sentimiento espiritual
Que te aguardan para hacerte
Bueno hasta el final.
Las cosas que nunca tuve
Son tan sencillas
Como irlas a buscar…
Tuve un árbol pero se secó
Tuve un niño y entre mis manos creció
Tuve un libro pero envejeció
El tiempo se llevó
Toda la inocencia que al nacer les dio.
Las cosas que nunca tuve
Son tan sencillas
Como irlas a buscar…
Por eso cuando te miro
Ya sin ninguna duda
Creo adivinar
Que estoy a un paso de la verdad
Cuando presiento que sé
Lo que se puede encontrar
Bajo esa risa feliz y un sentimiento espiritual
Que me aguardan para hacerme bueno hasta el final.
La novia que nunca tuve,
El primer amor
Que siempre soñé…
Esas pequeñas cosas 
Grande Pablo! Esta no es de mis preferidas pero me gusta.
Saludos Enrique!
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A mi me gustan muchas, muchas, casi todas sus canciones … un artista irrepetible
Saludos Little …
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Ahora me he acordado de una de mis favoritas: No ha sido fácil. 😉
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Tiene tu despedida de este blog la grandeza de lo sencillo. Gracias por estar ahí. Un abrazo, Enrique.
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Gracias a ti, Alfonso.
Un abrazo fuerte.
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No sé qué me perdí, aun así lamento que dimitas Enrique. Un abrazo.
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No, no te perdiste nada, amiga Aliney, es que tengo muchas obligaciones con mis amigos de la bata blanca (y verde), y tengo muy poco tiempo para seguir aquí. No obstante os sigo leyendo a todos cuando puedo, sois mi «gasolina vital».
Un abrazo muy fuerte
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Mucha suerte, amigo, la frase tuya que tomé prestada sigue guíandome en los viricuetos de la vida. Dile a esos amigos tuyos que te cuiden bien, eres una luz de las que no abundan.
Un abrazo multiplicado.
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PD: Si pinchas con el ratón sobre esa carita mía de ahi, puedes saber por donde existo
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Vuelve pronto Enrique…vuelve…no dejes de escribir…
Un fuerte abrazo….
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Un abrazo muy fuerte, amiga Stella.
PD: Si pinchas con el ratón sobre esa carita mía de ahi, puedes saber por donde existo
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¿Entonces es un hasta luego, Enrique?
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No, solo la estoy usando como copia de lo que publico en Blogger y me sirve de copia de seguridad. Solo eso.
Un abrazo, Joana.
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