12 mayo 2018
– Últimamente vengo preguntándome si alguna vez llegué a creer que era lícito sentir la necesidad de ser libre aún y siéndolo.
– Otras veces me dirigí a mi otro yo para contarle, en alguno de mis interminables novelas, preguntándole a modo de némesis profunda y no carnal, si era necesario sentir necesidad para apreciar lo que se tiene cuando logras sacar el alma y los deseos del fango laboral y social.
– En las más voluntariosas sesiones de la incinerada y escénica, memoria de mi idealismo juvenil, le y me, pregunto con cierto temor al «yo» de hoy: «¿Con todos sus defectos, connivencias de los que ostentan el poder y su innegable corrupción isquémica, conoces una forma de vida en tu ya prolongada vida, en la que la Sociedad en la que vives, jamás hubiera vivido mejor?
– Hace sesenta años por decir algo así me hubieran aplaudido, unos, y llamado traidor, otros, pero hoy si se lo cuento a algún joven en edad de estar en el paro en pleno derecho, se reiría de mi o, simplemente, pensaría que chocheo.
– Tomando ya el reparador café madrugador y mientras miro al cielo buscando respuestas, me contesto que cuanto más miro a mi alrededor en busca de valores e idealismos vivos en la Sociedad que me rodea, pienso en lo que, más o menos, decía el gran Groucho Marx en estas ocasiones: “Debo confesar que, quizás, nací a una edad muy temprana” … o así me siento … muchas veces, sí, pero solo cuando pienso...
Casi mejor lo hago sobre la marcha para que esté rico. Tu presencia ya hace bueno al café, Enrique, no seas tan exigente.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Es cierto y a cierta edad aún más, querida amiga Paz, que cuanto menos se piensa más feliz se es. Voy a seguir intentándolo, quizás a la enésima lo consiga.
Feliz noche, amiga
Me gustaLe gusta a 1 persona
Eres y sigues siendo genial ,i olvidado amigo y maestro Icástico.
Si tienes buen café prometo ir a verte alguna noche libre.
Un abrazo
Me gustaLe gusta a 1 persona
Pues no sé si nacimos demasiado pronto o no, lo cierto es que no no damos cuenta hasta que pasa…el tiempo. ¿Mejor ahora? Es posible, no lo sé. Demasiado de todo y carencias también de mucho, me lo dice también mi otro yo. Preguntarle a él cualquier cosa no está en el guión porque excede todo lo que pudimos imaginar. Así que mejor es no pensar, como dice Icástico. Muchas preguntas, pocas respuestas y bastantes dolores añadidos. Feliz domingo. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 2 personas
Las cosas cambian, Enrique. Pensar no se lleva, ni nacer a edades tempranas. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona